Impreso en mi sangre
llevo tu amor insaciable.
Recorre mi cuerpo
como al panal orquestado
se dirige el enjambre.
Como la miel a la piel
a mi ADN se adhiere,
tanto tú como yo arrastrar nos dejamos
por esta hermosa locura
que a la par cocinamos
con infinita ternura.
La mezcla resulta
una sutil confitura.
Entremezlando olor, sabor
y también textura.
Por la ventana se cuela
un rayito de luna,
mientras en tus brazos
tú a mi me acunas.
En la profundidad de nuestras miradas
encadenados estamos.
La fresca brisa nocturna
azota el coqueto visillo.
El frío no consigue apagar
el fuego, que continúa encendido,
dando calor a nuestros cuerpos unidos.
Un reloj a lo lejos
con su tic tac rompe el silencio.
Eso no nos distrae
pues los suspiros
amortiguan el ruido.
Al oído susurro: " cuanto te amo cariño ".
Me respondes con tu característico guiño.
Con tanta vertida pasión,
nos atraviesa un calambre.
Cogidos de la mano
a la cocina nos vamos,
nos ha entrado el hambre.
Queremos cocinar allí
el panal de rica miel
volviendo a dar rumbo al enjambre.
Autora: Juani Falcón
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