Dedicado a María José Vidal Prado y Alfonso Brezmes.
Erase una vez un poncho que no quería ser abrigo de alguien que, no, respetará a otro alguien. Al final, la realidad se impuso.
Terminó deshilachado, convertido en ovillo.
Terminó deshilachado, convertido en ovillo.
Olivia Falcón
Derechos Reservados ®
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